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Blog Mercado-Vino / Jueves 16 de Enero de 2014

Consejos a la hora de comprar un vino

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Seguro alguna vez compraste una botella que prometía todo y resultó ser un perno. ¿No querés que te pase de nuevo? Lee estos tips.

Revisá el corcho. Muchas etiquetas añosas a simple vista parecen estar perfectas, pero al beberlas son un vinagre en toda ley. Para evitar este mal trago, es importante sacarle el capuchón y revisar que el corcho no esté filtrado. Te vas a dar cuenta porque está pegajoso o porque está teñido por dentro. Observalo a través del cuello de vidrio: si el líquido ascendió por las paredes hasta la superficie, mejor olvidate de comprar o abrir esa botella. En caso de recibir una en este estado, devolvela antes de abrirla.

Que no tenga polvo en los hombros. Teóricamente, una botella debe permanecer acostada para que el corcho no se reseque. En ese caso, el polvo se ubica en algún punto de su cilindro; pero si está en los hombros es porque lleva mucho tiempo de pie. Y si así fuera, es muy  posible que el vino esté avinagrado.

No a la botella recalentada. Al momento de recibir conviene tocar la botella y tener una sensación térmica de su estado. Si está caliente - puede pasar incluso en lugares refrigerados-, lo más probable es que no esté en óptimas condiciones. 

Observar bien la etiqueta. Así como la imagen habla de la gente, en el vino una etiqueta habla de su historia: si está dañada o corrida quiere decir que la botella ha sido maltratada. Si está chorreada o descolorida, tené por seguro que fue expuesta al calor o a la luz del sol y no puede estar en buenas condiciones.

No asumir que más caro es mejor. Suele suceder que los vinos más caros se presumen como mejores. Hay que saber, sin embargo, que no todo lo que brilla es oro y que en materia de botellas esto se cumple muy especialmente. Mejor es buscar data sobre el productor y la región antes de hacer una compra salada. A más información, menos riesgo de comprar un perno.

Los vinos son como los Monjes, de perfil bajo y reservados. Si te ofrecen una botella que ha estado expuesta al sol o a la luz, es probable que el vino esté oxidado y arruinado. Siempre es mejor que lo saquen de la caja o una cava climatizada. También hay que evitar las botellas expuestas a la luz de las dicroicas en las estanterías. Cuanto menos expuestas, mejor conservadas van a estar.

Usá Internet.  buscar información en la web. Hacer una busqueda previa -especialmente si vas a comprar una etiqueta cara- puede salvarte de cometer un error.

No compres en sitios no calificados. Si navegás un poco verás que hay muchas ofertas demoledoras, hay ofertas que se originan de promociones que reciben los negocios que luego salen a liquidar estos saldos, siempre tené en cuenta: Lo barato sale caro.

Cuando te claves, no digas que no te lo advertimos.